Una de las nuevas tecnologías que más impacto está teniendo actualmente es la blockchain, en parte por su relación con el mundo de las criptomonedas (como el Bitcoin o el Etherium). Ya que el éxito de las criptomonedas está directamente relacionado con el uso de la tecnología Blockchain porque proporciona el entorno ideal en cuanto a seguridad, veracidad e integridad que este tipo de moneda virtual necesita.
Las aplicaciones de la cadena de bloques en otros campos como el de la gestión documental (registros de propiedades y obras de arte) o la industria de la salud y farmacéutica, ofrecen numerosos beneficios, por lo que cada vez más empresas miran hacia la blockchain en busca de soluciones fiables y adaptadas a las necesidades actuales del mercado.
Garantizar la integridad de los datos que se manejan es algo fundamental en sectores como el regulado, donde se utilizan datos sensibles de pacientes y se trabaja con información importante sobre medicamentos. La blockchain proporciona ese marco que necesita esta industria, abriéndoles grandes posibilidades para garantizar la integridad y seguridad de su información.
La blockchain o cadena de bloques es una tecnología que funciona como un gran libro de registro digital, donde cada registro realizado tiene garantizada su integridad y disponibilidad. Cada registro que se realice en la cadena de bloques es único e inalterable, siendo distribuido a todos los nodos que forman la blockchain.
La cadena de bloques sirve para registrar información y transacciones digitales sin necesidad de la participación de un tercero o intermediario. Esta descentralización la hace muy atractiva para las empresas y las personas pues elimina muchos costes a la hora de realizar operaciones económicas (elimina la comisión del intermediario, como por ejemplo, un banco).
Cuando hablamos de la cadena de bloques debemos destacar tres principales características que la definen y por la que se ha convertido en una tecnología fiable para gestionar información sensible e importante como la que se maneja en el sector farmacéutico.
La blockchain está compuesta por una serie de bloques o nodos interconectados que registran información encriptada. La información que se guarda en cada bloque es la siguiente:
Podemos ver cada bloque dentro de la cadena como un elemento inamovible al estar directamente relacionado con el bloque que le antecede y con el que le precede. Además, la cadena completa se guarda en cada nodo de la red, por lo que todos los nodos que forman la cadena de bloques tienen una copia exacta de los registros.
Veamos cuáles son algunas de las aplicaciones de la cadena de bloques en el sector farmacéutico:
Dentro de la industria farmacéutica se trabaja con dos tipos de datos sensibles e importantes que requieren de procesos especiales para garantizar su seguridad y evitar que queden expuestos a terceros, datos personales y médicos de los pacientes, e información sobre los medicamentos.
La cadena de bloques se presenta como una gran alternativa para poder gestionar de forma segura y fiable toda esta información que manejan las empresas del sector. La imposibilidad de alterar los registros en la blockchain permite almacenar y distribuir datos garantizando su integridad, es decir, que la información llegue al destinatario sin ser alterada.
Gracias a la transparencia que aporta blockchain, la industria farmacéutica puede llegar a ahorrar mucho dinero. En la cadena de suministros del sector intervienen muchos agentes y necesita de la colaboración de distintas personas, sistemas y procesos. La complejidad para garantizar el nivel de protección, control y seguridad es alta y requiere de una serie de gastos que pueden verse reducidos de forma drástica utilizando la cadena de bloques.
La blockchain simplifica el sistema para custodiar y garantizar la veracidad de los datos sobre los medicamentos durante todo este proceso.
Los laboratorios y fabricantes tendrán una forma segura y fiable de compartir sus datos clínicos y muestras médicas. Esta información sensible necesita un alto nivel de protección para garantizar su privacidad (que ninguna persona no autorizada pueda acceder a su contenido) e integridad (que los datos lleguen al destino sin sufrir ningún tipo de alteración). La blockchain es la respuesta ideal para registrar, custodiar y transmitir toda esta información sin riesgos a que sea interceptada por terceros no autorizados para utilizarla en su propio beneficio.
Con la cadena de bloques el sector farma tiene una herramienta importante para luchar y protegerse contra los ciberataques.
Los laboratorios y fabricantes del sector pueden utilizar la blockchain para certificar la autenticidad de sus medicamentos, con un sistema inalterable que garantiza a los usuarios que están utilizando productos verificados 100 % por la farmacéutica, y que no han sufrido ningún tipo de variación o modificación posterior a su proceso de fabricación.
La blockchain es una tecnología con características que se adaptan a las necesidades de la industria farmacéutica a la hora de proteger los datos que manejan sobre sus productos y clientes.
Su aplicación para gestionar la cadena de suministros permite que las empresas del sector puedan aprovecharse de todas las ventajas que ofrece la blockchain.
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