La forma de hacer negocios ha cambiado y las empresas están inmersas en una transformación digital para poder ser más eficientes y competitivas en el mercado actual.
Esta transición hacia lo digital no puede ser entendida sin el estudio y análisis de la gran cantidad de información existente. Los datos se han convertido en el valor más importante para las empresas por lo que los profesionales en analítica de datos son muy demandados.
Se espera que durante 2020 el volumen de datos alcance los 40 zettabytes. La gestión y el análisis de todo este Big Data —del que se estima que al menos un tercio contiene valor—, es fundamental para que las empresas puedan acercarse a los clientes y conocer sus gustos y necesidades. Tanto los datos internos como externos son la clave de una transformación digital exitosa que proporcione a las empresas ventajas en la toma de decisiones.
La transformación digital es un concepto que se puede definir como el cambio o transición que deben realizar las empresas para adaptarse al nuevo entorno digital. El auge de las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) ha cambiado la forma de vida en general, afectando a la manera de comprar, las exigencias y la búsqueda de información de los clientes.
El proceso de transformación digital en una empresa no abarca sólo la digitalización de procesos o el trabajo en la nube, implica también, una constante monitorización y estudio de las necesidades del cliente para ir adaptando a la empresa a este entorno dinámico. La transformación digital está ligada a la innovación, a la adaptabilidad, a los procesos operacionales, a los modelos de negocio, así como a las personas y colaboradores, todo ello apoyándose en el estudio de los datos.
El Big Data es clave en este proceso de transformación, pues permite que las empresas sean más rápidas a la hora de tomar decisiones y aumenten su productividad.
A través de los nuevos canales de comunicación fluye una gran cantidad de información de los clientes o posibles clientes, que las empresas no deben despreciar. Redes sociales, correos electrónicos, hasta llamadas telefónicas o comentarios en una web, todos estos datos permiten identificar las necesidades de los clientes para ofrecer un mejor servicio de atención al cliente que incremente el valor de la empresa.
El proceso de transformación digital debe estar apoyado en un estudio y análisis de los datos para poder identificar y aprovechar todas las oportunidades que se presentan en el mercado actual, y poder diferenciarse de la competencia. Conocer los hábitos de compra, valoración de los servicios, grado de satisfacción, e información general sobre los compradores, constituye una ventaja importante para las empresas. Uno de los retos a los que se enfrentan las empresas durante esta transformación digital es el de convertir los datos en un valor de negocio.
Los avances tecnológicos en materia de información y comunicación ofrecen a las empresas numerosas ventajas entre las que podemos destacar.
Utilizar la analítica para el estudio de la información proporcionará a las empresas la capacidad de responder de forma más rápida y precisa a las necesidades de sus clientes. La transformación digital permite que las empresas sean más ágiles, acelerando sus procesos e identificando tendencias, lo que permite que se facilite la toma de decisiones. El tiempo de respuesta es un factor determinante para los clientes, que buscan soluciones rápidas a sus problemas.
Uno de los grandes beneficios que aporta la transformación digital es la mejora en cuanto a rapidez y calidad de los distintos procesos que se llevan a cabo dentro de una empresa. El personal de la empresa dispone de mejores herramientas que facilitan su trabajo y mejoran su eficiencia. Todo esto, unido a la rapidez en la toma de decisiones y el conocimiento de las necesidades de los clientes, consigue que las empresas aumenten su productividad.
El análisis del Big Data contribuye a mejorar las distintas acciones llevadas a cabo por el departamento de marketing de las empresas, proporciona mejor información a los canales de venta y ayuda a segmentar eficientemente el mercado y a conocer mejor las necesidades de los clientes y los clientes potenciales.
Tanto la imagen que proyecta la empresa como su reputación se verán incrementadas realizando una transformación digital adecuada, basada en el estudio de los datos y con el cliente como objetivo final. El proceso de transformación digital requiere que las empresas sean innovadoras y estén en constante evolución, dejando atrás el modelo tradicional estático.
Ya hemos visto que la transformación digital debe ir asociada al análisis de datos y enfocada hacia las necesidades de los clientes, lo que repercute en numerosas ventajas para la empresa, como la mejora en la toma de decisiones. Otro aspecto fundamental para que la transformación digital y el análisis del Big Data se realice con éxito y mejore la eficiencia de las empresas, es la importancia de las personas en todo este proceso.
Se ha pasado de un sistema donde la toma de decisiones se basaba en la experiencia de unas pocas personas, a la toma de decisiones basada en los datos, tanto internos como externos a la empresa (que recogen la información de muchas personas).
La implicación del personal de la empresa en el proceso de transformación digital es fundamental para su éxito. Esta transformación afecta a todos los departamentos dentro de una empresa, desde el financiero y administración, hasta marketing, producción y atención al cliente.
Los datos están marcando la diferencia, hoy en día, entre las empresas que toman decisiones inteligentes enfocadas sobre los clientes, y otras empresas que se encuentran “en la oscuridad”, tratando de tomar decisiones sin disponer de la información suficiente.
Las nuevas tecnologías, como el uso de dispositivos móviles, han propiciado que los clientes sean más exigentes y quieran una inmediatez en la resolución de sus demandas, bien sea a la hora de comprar, solicitar información, pedir un presupuesto o solicitar una atención al cliente, etc.
En el caso de que una empresa no satisfaga esa necesidad de un servicio rápido, el cliente buscará rápidamente una alternativa. Las empresas adaptadas a la tecnología actual que realicen análisis de datos serán más ágiles en sus procesos y servicios y estarán a la altura de las demandas del mercado actual.
Los datos son la clave para que las empresas sean competitivas en el mercado actual y su análisis no puede ser llevado a cabo sin una transformación digital. Aquellas empresas que consigan llevar este proceso a cabo, siendo adaptables o innovadoras, serán las que triunfarán.
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