No es una novedad que las empresas cada vez son más conscientes de que el activo más importante y que más valor aporta a sus proyectos, son las personas.
Disponer de un equipo técnicamente competente, alineado con la misión, visión, valores y cultura de la organización, supone una ventaja competitiva en el mercado que conduce a las organizaciones a alcanzar el éxito en sus negocios. Y es por ello por lo que los procesos de atracción y selección de talento se han convertido en fundamentales para las empresas.
La gestión de dichos procesos no es tarea fácil, en tanto requieren un tiempo de dedicación, costes, herramientas y habilidades, que se convierten en tediosas cargas para las compañías. Además, esto se complica con la escasez de talento que existe en el mercado laboral, en especial, con respecto a ciertos sectores como el de IT.
Las empresas deben abordar la transformación digital también para los procesos vinculados a sus recursos humanos, tarea que no es complicada, pero que requiere de inversión en un momento incierto para todas las compañías. Esta apuesta tecnológica, permite crear un plan y una estrategia de comunicación clave para la atracción de talento.
Todo ello, en su conjunto, conduce a que se vuelva aún más compleja a tarea de encontrar candidaturas o contratar al perfil adecuado para las empresas. Lo que se ve agravado por una habitual falta de conocimientos de las propias empresas o de sus departamentos de RRHH en este ámbito tecnológico, aunque puede solventarse mediante la externalización del proceso de selección a consultoras especializadas en dichos perfiles.
Los dos procesos más habituales en las empresas para cubrir una necesidad de talento dentro del sector de la salud e IT, son el headhunting y el outsourcing.
El Headhunting es un proceso de selección de talento, aunque con una peculiaridad, el candidato en cuestión puede no estar interesado en el empleo, ya que no se encuentra en búsqueda activa de empleo. La persona encargada (headhunter) debe buscar un perfil que se adapte a las necesidades específicas del cliente, que normalmente son difíciles de encontrar.
Por otro lado, el Outsourcing se basa en delegar servicios y actividades a terceros para disminuir la carga de trabajo. Normalmente este tipo de tareas son más operativas y así la propia empresa puede dedicar su tiempo a otras actividades que aporten mayor beneficio de negocio.
Externalizar el proceso de selección de talento lleva a la empresa a encontrar a la persona idónea para el puesto de trabajo, y además tiene muchas otras ventajas y algunas de ellas son:
Para poder tener una buena experiencia a la hora de externalizar la contratación de nuevos empleados, debemos tener en cuenta varios puntos, como, por ejemplo:
Mediante la contratación de empresas de captación de talento se incrementa el valor de la empresa ayudando en la búsqueda y evaluación de grandes profesionales. Por tanto, se utilizan estrategias realizadas por el employer manager para diseñar el proceso de búsqueda y el proceso de contratación de la nueva incorporación en la empresa.
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